
Planeando
Que más pueden hacer los golondrinos,
si de primavera a verano,
escudriñan lares templados,
y no encuentran ningún cobijo.
Con la tarde sombría se atribulan,
deleitándonos con sus planeos,
los sollozos de los rorros se acrecientan,
arrobando ocasos desvaídos.
Por la mañana, se encuentran con la rora,
y ya no pueden hacer nada,
occisos están en la rosaleda,
a la espera de la jardinera.
Revoloteando con fulgor y algazara,
al clamor de la aurora desgastada,
se encuentra ávido el abanto,
desesperado al oír el canto.
Y ahora, debuta el prólogo ceñido,
el que siempre fue plañido,
de ese relato perdido,
el que siempre tú has sido.
2012 © By Pedro Luis Ruiz

|
- Poner enlaces a otros sitios web.
- Publicidad de sitios personales o profesionales.
- Publicar un post en un apartado que no corresponde.